#EnModoPlay
Expectativas irreales en una relación.
No cabe duda de que si existe un deseo natural de cada uno de nosotros, ese deseo es que todo fuera como lo planeamos, que todo fuera tal y como lo imaginamos, de que esa persona a la que amamos, llámese pareja, hijo, esposa, amigo, compañera hiciera eso que nos gustaría que sucediera.
Como bien lo sabes, eso es algo que rara vez sucede, no todo lo que quisiéramos que pasara, pasa, no todo lo que nos gustaría que fuera, en verdad es.
Y es ahí en donde entra esta palabra clave, expectativa.
Tú en el fondo generas una expectativa en cada ámbito de tu vida, en el amor, en el trabajo, en tu familia, prácticamente en todo lo que podemos razonar o imaginar.
El inicio de algo, el desarrollo de algo y hasta el final de algo está relacionado con las expectativas que tenemos de cada momento de nuestra vida.
Y como muchas veces las expectativas que tenemos sobre algo o alguien no se dan, podemos vernos envueltos en conflictos y decepciones.
En una relación de pareja o simplemente de tus círculos sociales, cuando una exceptiva no se cumple, es decir no se da lo que esperas que se dé, o no se siente lo que esperabas sentir, propicia la desilusión y esas desilusiones lastiman nuestras relaciones.
Cuando llega una fecha importante y tu pareja no la recuerda, cuando inicias un nuevo trabajo y no es lo que esperabas o simplemente esa persona que te importa no reacciona como esperabas que fuera es donde se originan conflictos.
Las expectativas irreales que tenemos en nuestra vida se dan por una distorsión de la realidad y la falta de tener una noción, un conocimiento pleno de con quienes estamos de en donde nos estamos metiendo y lo que estamos haciendo.
Esas expectativas irreales son la fuente principal de las decepciones en una relación.
Ya que cuando no se cumplen nuestras expectativas, sentimos que nos han fallado, que no hubo compromiso de parte de las demás personas y sentimos desilusión, perdemos la emoción, el ánimo dentro de nuestras relaciones, amigos, trabajo.
Sin embargo, no se trata de un fallo o un engaño de la otra persona, sino de una mentira que se han creado en su mente sobre lo que su pareja debería hacer y lo que deberían otorgarles, aun cuando no hayan existido de por medio promesas o conductas que dejaran ver que podría suceder algo que esperamos.
Esas expectativas irreales que tenemos principalmente en el inicio de nuestras relaciones y del comienzo de algo nuevo en nuestra vida, son las que favorecen el deterioro de nuestras relaciones.
Nuestra mente sin duda se ve influenciado por lo que vemos, lo que leemos y con lo que nos relacionamos.
Cuando existe una relación de dos, damos por sentado y suponemos que conformo avanza el tiempo en una relación se deben de ir dando cierta cosas en ella, por ejemplo el simple hecho de cumplir un aniversario y suponer que nuestra pareja debe de obsequiarnos cierta cosa y al no suceder, al no cumplir esa expectativa que nosotros mismos nos pusimos caemos en una molestia, disgusto e inconformidad. Esto no solo aplica en una pareja aplica en todos nuestros círculos sociales y entornos en los que nos desenvolvemos.
Aquí existe un protagonista sin duda alguna es la suposición.
El estar suponiendo en lo que debería de hacer la persona, en suponer en lo que debería ocurrir en cierto tiempo, suponer en que debería de sentir e incluso decir la otra persona y no platicarlo antes para conocer que esperamos en la relación provoca una serie de conflictos con quienes nos relacionamos.
Las expectativas irreales pueden llegar a echarnos a perder la fiesta antes de que inicie la música, pueden hacer gris algo que pudo tomar color y sin duda esto podría disiparse si existiera la disposición por parte de ambas partes de mejorar la comunicación y evitar el suponer.
Dejemos de estar suponiendo como debe de reaccionar la otra persona, entendamos que cada uno de nosotros, pensamos, sentimos y vivimos de una manera diferente.
Deja de pensar que todo debería ser de tal manera, si quieres algo dilo, platiquémoslo, acordémoslo y así podemos tener una expectativa real de lo que nos espera en nuestras relaciones.
¿Cómo esperar que alguien baile con nosotros en la pista si no conoce la canción?
Hagamos un esfuerzo en mejorar la manera en la que nos comunicamos, busquemos platicar más, trata de conocer que preferencias, gustos, metas y expectativas tiene tu pareja, tus amigos, tus hijos, tus clientes , tus compañeros y tu mundo.
Así podremos dejar de suponer y saber si eso que estamos esperando que la otra persona haga, sienta o diga puede ser una expectativa real.
Deja de crear expectativas irreales de los demás evitando el suponer y comenzando a conocer si lo que buscas está ahí en donde estas.
Una vez más una buena comunicación sin duda solo traerá crecimiento y expectativas reales y positivas a tu vida.
A crear esa versión de nuestras relaciones de la mejor manera y hazme un favor, hoy mañana y siempre #EnModoPlay
LCC. Jonathan Manjarrez
Conductor/ Conferencista
Comunicación efectiva.